Los que aprenden contabilidad, en alguna etapa de ese aprendizaje conocen un conjunto de indicadores que hablan de la “salud” de la empresa. El adjetivo de “saludable” o “no saludable” hay que aclararlo para los empresarios y emprendedores que “no manejan” el lenguaje técnico de estos indicadores. Aclararemos algunos aspectos de estos indicadores como también la percepción en quien recibe esta información.
COSAS QUE HAY QUE APRENDER A MIRAR CUIDADOSAMENTE PARA PREVENIR PROBLEMAS
1. Razón o Ratio de Liquidez de una Empresa: Se define como la división de los Activos Circulantes entre los Pasivos Circulantes. La fórmula es muy simple: Total de Activos Circulantes / Total de Pasivos Circulantes. Sin embargo, para entender mejor, la fórmula HAY QUE DESAGREGARLA, es decir explicitar sus componentes. Así, tenemos en los casos más simples que:
Total Activo Circulante = Caja + Cuentas por Cobrar + Inventarios + Otros Activos Circulantes.
Total Pasivo Circulante = Cuentas por Pagar + Proveedores + Otros Pasivos Circulantes.
¿Pero qué significa “Circulante”?
Se trata de una categoría que divide a los activos y pasivos de una empresa. Hay activos fijos o de largo plazo (maquinaria, equipos, instalaciones, etc.) y, los activos que corresponden a lo que se está utilizando en el corto plazo (un año)
¿Cuáles son esos?
Básicamente el dinero que se tiene en el Banco o en Caja, los Documentos y/o Cuentas por Cobrar a los clientes que se les ha dado crédito simple (sin interés), y cuyos plazos se encuentran en un periodo que no exceda a un año y, los inventarios de materia prima, productos terminados, productos adquiridos para distribuir comercialmente. En otras palabras, activos que ACTIVOS QUE ESTAN CIRCULANDO durante el año.
Y con los pasivos pasa lo mismo. Se trata de las deudas de la empresa que deben pagarse dentro del periodo comercial; en otras palabras, DEUDAS QUE ESTAN CIRCULANDO durante un año.
Entonces ¿QUÉ NOS INDICARIA ESTA RAZON DE LIQUIDEZ? Bueno, por tratarse de activos circulantes y pasivos circulantes, se trata de activos y pasivos que son más simples de liquidar (convertirlos a dinero en efectivo) en un plazo máximo de un año.
Por lo tanto, la razón nos indicaría cuánto tenemos en términos monetarios en activos de corto plazo PARA RESPONDER Y PAGAR los pasivos o deudas de corto plazo.
Imaginemos la siguiente situación:
ACTIVOS CIRCULANTES = Dinero en Caja: $5.000.000 – Cuentas por Cobrar: $10.000.000 – Inventarios: $25.000.000
PASIVOS CIRCULANTES = Cuentas por Pagar: $6.000.000 – Proveedores: $20.000.000 – Otros Pasivos Circulantes: $14.000.000
Con estos datos, vemos que los Activos Circulantes alcanzan a $40.000.000 y los Pasivos Circulantes alcanzan a $40.000.000. O sea que si aplicamos la formulita, sería:
Activos Circulantes $40.000.000
Razón de Liquidez = —————————– = —————– = 1,0
Pasivos Circulantes $40.000.000
Usted dirá, por cada peso que la empresa debe, existe un peso en activos para responder. ¡Estamos bien!
Pero vamos a la experiencia:
a) Esa razón se calcula con la información de un balance general. Y un balance general no es más que una FOTO de un instante de la empresa.
Por ejemplo, un balance con fecha 31 de Marzo corresponde a la fotografía que representa el resultado de la gestión entre el 1 de enero y el 31 de marzo. Y nada más.
Para saber cómo le va a una empresa se requieren varias fotografías. Una sola no basta. Una secuencia fotográfica es lo mejor para el propio empresario como para los acreedores, de modo de ir armando una «PELÍCULA» y ver CÓMO EVOLUCIONA.
Por eso los bancos piden información anual y de dos años a lo menos para tratar de ver la película en lugar de cada foto.
b) El indicador arrojó que se tendrían cubiertas las deudas con los activos circulantes, ya que dio por resultado igual a 1,0 ¿Pero es real esta conclusión? Si la empresa tuviese que pagar el día 1 de Abril, es decir un día después de la fecha final del balance, la respuesta es NO ¿Por qué se preguntará usted? Porque en una situación como esa usted sólo cuenta (según el balance) con sólo $5.000.000 en Caja/Banco (que es el dinero efectivamente líquido que posee).
Para poder cubrir el resto de las deudas tendría que LIQUIDAR las Cuentas por Cobrar y los Inventarios. Y eso no es tan simple.
Primero, para obtener efectivo rápido usted podría verse obligado a entregar las Cuentas por Cobrar a una empresa de factoring, la que por supuesto le dará menos efectivo que lo que señala el balance. Segundo, también es altamente probable que tenga que vender con descuento sus Inventarios, por lo cual recibirá menos efectivo. Por lo tanto, el resultado final de la fórmula sería MENOR QUE 1,0. En otras palabras, tendrá una cobertura menor de activos para cubrir las deudas.
NUESTRA RECOMENDACION
Es importante entender que las razones o indicadores poseen aspectos ocultos que normalmente no se mencionan en la literatura formativa.
Cuando una razón de liquidez arroja un valor de 1,0 ésta sería válida si se pudieran vender las cuentas por cobrar y los inventarios a lo menos al valor que indica el balance, lo que es, por decir lo menos, ilusorio.
En la práctica, este tipo de situaciones tienen costos económicos que reducen el valor real de los activos y NO reducen el valor real de las deudas, quedando en desventaja.
Por eso, es importante aprender a mirar cuidadosamente este tipo de indicadores haciendo las consideraciones pertinentes para poder contar con un indicador realista y usted pueda provisionar recursos en caso que tenga que enfrentar situaciones inesperadas.
OTROS ALCANCES ESTRATEGICOS DE ESTE APRENDIZAJE
Este tipo de situaciones le ayudan a entender que tal vez, dependiendo del negocio, su razón de liquidez meta para cada mes, o bimestre, o trimestre, etc. debería ser no 1,0 sino, por ejemplo 1,5.
Además, sabiendo esto podría establecer una política de crédito un poco más restrictiva para contar con un monto de Cuentas por Cobrar lo más bajo posible y una gestión de inventarios más estructurada de modo que ante eventualidades no tenga más inventario que el de seguridad para asegurar continuidad y no tener exceso de inventarios.
Esta es una forma de pensar en términos de la empresa como un sistema, donde cada parte puede afectar positiva o negativamente a otra dentro del sistema.
Este artículo forma parte de una serie en que se irán estudiando de modo pragmático distintos indicadores enfrentados a la realidad de una empresa.